ANÉCDOTA
ALMOHADAZO EN LA CARA
Ocurrió una noche de llovizna en Huancayo, mis
padres, mi abuelita, mi hermano y yo estábamos sentados en la sala de mi casa
viendo televisión.
Luego, mis padres y mi abuelita se fueron a
servir la merienda, mi hermano y yo nos
quedamos en la sala. Después nos
aburrimos de estar sentado, entonces nos pusimos a jugar a los almohadazos.
Estaba tan divertido que nos pusimos a descansar un rato. De pronto, yo
aproveché que mi hermano estaba distraído para darle un almohadazo en la cara,
yo me maté de risa, porque con el almohadazo le saque un diente que se estaba
moviendo, y que él no quería que se salga.
A continuación, fuimos a avisar mis padres; mi hermano estaba llorando, yo
estaba que me mataba de la risa. Mis padres el enterarse se rieron al ver que
mi hermano estaba desmuelado.
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